La odisea de Shackleton 2
Publicaciones de Germán Diograzia
Una nueva vida * Transcurrieron meses de ausencias y olvidos. La rutina apagaba de a poco mi vida. Y los anocheceres silenciosos me cubrían lenta e inexorablemente. Tantas veces recorrí en los grises días de agosto aquellas calles. En momentos me sentaba bajo los secos tilos en esa plaza Las gentes indiferentes iban y venían sin …
Hitler en Argentina Le contaré una historia…tal como me ha sido contada. Es absolutamente verídica, estoy convencido de ello, además está esa prueba, tan clara, que no admite discusión. En mi carácter de navegante soy invitado, a las cenas mensuales que realiza la Hermandad de la Costa el tercer jueves de cada mes, en alguno de los clubes …
El * Era un delicioso anochecer de julio y el aire olía a pinos. De vez en cuando oía a las palomas que se arrullaban con su dulce voz, o divisaba escondido entre los helechos el pecho dorado de un faisán. Pequeñas ardillas espiaban su paso desde la copa de las hayas, y los conejos escapaban entre …
El ser * Les digo que aquella noche el cielo refulgía intensamente por las incontables estrellas. El lago muy quieto mojaba la sombra de aquellos infinitos ojos. El marco fue perfecto, sin brisa, con una luz difusa, que el cielo derramaba con exacta intención. A lo lejos los árboles fueron testigos. Aún me llega a través …
El barco que tiene alma * Cuántas veces lo vi descansando en la marina, esperando el viento, sin sospechar siquiera que una vez el gran Vito Dumas lo navegara entre Buenos Aires y Mar del Plata. El Sirio II, uno de sus barcos aun navega. Se encuentra amarrado en una de las marinas del Club …
Philipe, el tiburón y mi cumpleaños* Mi prima (que por entonces vivía con nosotros) Había cumplido 15 años, edad en la que toda señorita espera la fiesta, el vestido y todas esas cosas de niña que cree que es mujer. Mi padre –que como he contado- viajaba permanentemente por el mundo como diplomático, regreso un día …
El oro del Olonés * En aquella época de mis diez años solía caminar descalzo cada mañana por la playa, dejando atrás las últimas casas de los isleños. La Tortuga, esa pequeña isla que fuese el centro de la piratería y reuniera a los famosos bucaneros, fue mi hogar. Mi padre viajando por el mundo …
El manuscrito en la botella * Según consta en el diario de mi abuelo (copiado a su vez de su abuelo): El día de todos los santos mientras disfrutaba mi pipa observando la mar una botella gris llegó a mis pies con el siguiente escrito. Estimo que ha estado flotando más de cien años. Doy …